Obras Misionales Pontificias (OMP) presentó ayer el proyecto pedagógico “Con Jesús Niño a la Misión”, de la Infancia Misionera, en el salón de actos del Banco Sabadell. Dicha iniciativa consiste en una serie de herramientas pensadas para que los niños tomen un papel protagonista en el anuncio del Evangelio, con todas las implicaciones que esta labor conlleva y que tanto tienen de actualidad en lo relativo a temas como familia, migraciones, confianza o servicio. En palabras de D. José María Calderón, director de esta institución pontificia, “con este proyecto, OMP quiere despertar la dimensión misionera en todos los niños y niñas.”

“En este sentido, desde OMP trabajamos a disposición de parroquias y colegios, para que desde bien pequeños, cada uno de nosotros pueda plantearse la misión como verdadera vocación”, continuó diciendo Calderón. Y es que tal y como pasó a explicar más tarde el educador Fernando Alberca, desde niños ya estamos perfectamente preparados y diseñados para conectar con las necesidades de los demás. “La misión de los niños consiste en transmitir lo mejor que tienen. Démosles esta oportunidad”, comenzó diciendo el pedagogo en su motivador discurso. A él correspondió aterrizar la vocación misionera en terrenos más temporales, como la ciencia o el humanismo. “Desde que salimos del seno materno, entramos de lleno en la civilización, listos para conectar con otros, preparados para la felicidad, y por tanto, para hacer felices a quienes nos rodean”, aseveró.

Por su parte, Fernando González, responsable de este proyecto para OMP fue el encargado de cerrar la tarde con una intervención que detalló la puesta en práctica de todo este trabajo. “La idea originaria fue de D. Anastasio Gil», sacerdote que hasta su fallecimiento hace pocos meses ocupó el cargo de director de OMP”, explicó González. Y continuó diciendo “los colegios, las parroquias y los niños han cambiado muy rápidamente, y nos sabía a poco dedicar un único domingo al año a la Infancia Misionera. Ahora, tras este trabajo que queremos poner en vuestras manos hemos planificado un cuatrienio para hablar de lo que es un niño misionero.”

“Con la intención de ayudaros en vuestra tarea evangelizadora con los niños de entre 6 y 12 años, hemos propuesto un recorrido por la infancia de Jesús, el primer misionero, por los lugares en los que vivió en relación con Dios Padre y con sus hermanos”, finalizó.